Estos cuadros pintados a mano representan una escena costera tradicional, con figuras femeninas y niños en la playa, capturando momentos cotidianos de descanso y actividad junto al mar. La composición transmite serenidad y vida, con una paleta de colores suaves y detalles que evocan el ambiente cálido y humano de las costas mediterráneas.
La obra está firmada y se presenta en un marco ornamentado de estilo clásico, con relieves florales y acabado en tonos plata envejecida sobre base oscura, que realzan la pintura y aportan elegancia. Es una pieza ideal para espacios que valoran el arte figurativo, la tradición y el detalle artesanal.















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